Una macabra casualidad, a priori inexplicable, ha hecho que en menos de una semana dos exconcursantes del talent show de La Voz hayan sido asesinados. Cuando los seguidores del programa y los ciudadanos en general todavía no han asimilado la muerte de la joven Christina Gimmie, finalista del programa en Estados Unidos, a consecuencia de los disparos de un fan, el reality vuelve a ser tristemente noticia, hasta vez por el asesinato de uno de los concursantes de la edición mexicana.
Se trata del joven de 31 años Alejandro Fuentes, quien murió abatido a tiros el pasado jueves en Chicago, la ciudad en la que Alejandro, más conocido como Jano, había nacido y en la que residía. Jano, que además de cantante, era actor, productor y empresario, era propietario de una escuela de actuación.
El pasado jueves, una vez finalizadas las clases, salió de su escuela para dirigirse en su coche a celebrar su 31 cumpleaños con unos amigos. Según fuentes policiales, en el trayecto fue víctima de una emboscada. Al parecer, un hombre armado lo detuvo y le instó a bajar del coche. Ante la negativa de Jano, este recibió tres disparos en la cabeza. Las gravísimas heridas producidas por las balas le causaron la muerte este sábado.